Saltar la navegación

Ley de Ohm

 

Se retoma la primera ecuación considerada como una de las más importantes que deben aprenderse para este campo.

Matemáticamente no es difícil, pero sí es elemental ya que podrá ser aplicada a cualquier red en cualquier marco de tiempo. Es decir, se aplica a circuitos de corriente directa (CD), circuitos de corriente alterna (CA), circuitos digitales, así como a cualquier tipo de señal aplicada. Además de ser aplicar para un periodo determinado o para respuestas instantáneas.

La ecuación se puede obtener directamente de la siguiente ecuación básica para todos los sistemas físicos:

Comentario: Toda conversión de energía determina la forma de otra y de esta manera se puede relacionar con esta ecuación.

En circuitos, el efecto que estamos tratando de establecer es el flujo de carga, o corriente. La diferencia de potencial o voltaje, entre dos puntos es la causa (“presión”), mientras que la oposición es la resistencia encontrada. Sin un voltaje aplicado en un circuito, no habrá reacción en el sistema ni corriente en el circuito.

La corriente es una reacción al voltaje aplicado y no el factor que hace que el sistema se mueva o actúe. Cuando se aplica un alto voltaje al circuito el resultado es una corriente alta. Estos elementos son sustituidos en la ecuación:

La ecuación se conoce como Ley de Ohm en honor a George Simon Ohm.

La ley establece que con una resistencia fija, cuanto mayor es el voltaje a través de un resistor, mayor es la corriente. 

En otras palabras, la corriente es proporcional al voltaje aplicado e inversamente proporcional a la resistencia.

Mediante manipulaciones matemáticas simples, el voltaje y la resistencia se determinan en función de las otras dos cantidades:

A la hora de especificar una resistencia no es suficiente indicar su valor óhmico, sino que es necesario detallar la máxima potencia que es capaz de transformar en calor llamado por efecto Joule sin calentarse (también puede indicarse la máxima corriente admisible).

El valor de la resistencia puede indicarse directamente escribiendo su valor en la superficie o puede emplearse como se hace en electrónica, un código de colores como se muestra en la imagen, en este caso la resistencia presenta cuatro bandas de colores, numerados a partir de la banda más cercana a uno de los extremos.